Si te encuentras pasando un momento difícil, yo te invito a alabarlo.
No importa la enfermedad, el problema o circunstancia, tu alabanza tiene poder. Cuando le alabas desde lo profundo de tu corazón, con sinceridad, hay liberación, pueden ocurrir milagros a tu alrededor. Puedes sin darte cuenta provocar un terremoto espiritual donde las cadenas de los oprimidos sean rotas, donde la sanidad del alma, el cuerpo y el espíritu puede ser lanzada para las vidas.Adora a Dios por lo que es él, el dueño de tu vida y de tu corazón. Aunque no veas nada a tu alrededor, aunque la respuesta que estás esperando parezca no llegar,Porque adorándole estás demostrando que lo amas, que tienes fe en él y que confías en que él sabe lo que es mejor para ti.Dios te bendiga mucho, un abrazo.